El departamento de Antioquía en Colombia disfruta de una gastronomía de carácter muy personal y con una gran diversidad cultural de la zona. El origen de ésta viene de las épocas precolombinas, cuando ya se utilizaban gran parte de los productos e ingredientes como el maíz, la yuca, los frijoles junto con carne y pescado.
Tras la colonización, nuevos alimentos comenzaron a formar parte de la dieta habitual de los habitantes del departamento, como el plátano, el arroz o el aguacate. De esta manera se fueron formando nuevo platos y tradiciones con influencia extranjera, pero manteniendo parte de las costumbres antioqueñas anteriores. La carne de cerdo llegada de Europa, se convierte en protagonista de parte de las recetas, como los típicos chorizos y chicharrones.
Con el paso de los siglos algunos factores modifican los hábitos alimentarios de los habitantes del departamento, como el auge del café en el sur de la región o la aparición de sistemas de refrigeración. Lo que sigue caracterizando hoy en día a la cocina de la zona es la gran variedad de productos como el café, el cacao, la panela, el maíz la trucha, la carne, el fríjol, etc. Cada subregión del departamento utiliza ingredientes específicos tradicionales.
Los platos más conocidos son la parva antioqueña, que es una pasta de maíz y yuca con queso, a la que se incorpora leche y mantequilla. También las arepas antioqueñas, que en todas sus variedades se siguen consumiendo como uno de los platos más reconocidos de toda Colombia. Y por supuesto, la bandeja paisa, el plato más importante de la cocina antioqueña. Se compone de carne molida, chicharrón, chorizo, morcilla, fríjoles, arroz, plátano maduro, huevo frito, tomate rojo, aguacate, arepa y hogao. Debido a la gran cantidad de ingredientes que componen el plato, se suele servir en una bandeja. Otros departamentos adaptaron este plato a su gastronomía local, pero la tradicional pertenece a Antioquía.