Hasta el 18 de diciembre, Corferias se convirtió en el epicentro de la diversidad gastronómica nacional con la sección “Colombia a la Mesa”, una propuesta que reunió lo mejor de la cocina colombiana y lo vinculó con la riqueza artesanal del país. El evento ofreció a los visitantes un recorrido sensorial por las tradiciones culinarias de regiones como San Andrés, Antioquia y la Costa Caribe, resaltando la identidad cultural que se expresa tanto en los sabores como en las manos que crean.
Una muestra diversa y deliciosa
La iniciativa “Colombia a la Mesa” presentó una amplia variedad de platos y preparaciones que reflejan la pluralidad de la cocina nacional. Desde el frescor caribeño con sus pescados y mariscos, hasta las recetas tradicionales antioqueñas con fríjoles, arepas y carnes, pasando por la influencia isleña de San Andrés con sus especias y preparaciones marinas, cada región aportó un matiz único. Los asistentes pudieron degustar y conocer la historia detrás de cada receta, entendiendo cómo la gastronomía se convierte en un puente entre tradición y modernidad.
Gastronomía y artesanía: un vínculo cultural
Uno de los aspectos más destacados de la muestra fue la integración entre la cocina y la artesanía. Los espacios de exhibición no solo ofrecieron alimentos, sino también utensilios, vajillas y piezas elaboradas por artesanos colombianos, reforzando la idea de que la cultura se construye de manera integral. La experiencia permitió apreciar cómo los saberes culinarios y artesanales dialogan entre sí, creando un relato que celebra la identidad nacional.
Un esfuerzo por fortalecer la cultura gastronómica
La sección “Colombia a la Mesa” se enmarca en el compromiso de Corferias por promover la riqueza cultural del país y ofrecer un espacio de encuentro para productores, cocineros, artesanos y consumidores. El evento buscó visibilizar la importancia de la gastronomía como motor de desarrollo económico y social, así como su capacidad de proyectar la imagen de Colombia en escenarios internacionales.
Experiencia para todos los sentidos
Los visitantes disfrutaron de degustaciones, talleres y demostraciones en vivo, que les permitieron acercarse a la cocina colombiana desde una perspectiva participativa. Cada plato fue acompañado de relatos sobre su origen y significado, reforzando la idea de que la gastronomía es también memoria y patrimonio. La propuesta se convirtió en una oportunidad para que familias, turistas y profesionales del sector vivieran una experiencia completa, donde el sabor, la tradición y la creatividad se encontraron en un mismo lugar.
