Hace unos días hablamos de los platos más representativos de la gastronomía catalana, y en lo que respecta a los dulces, la crema catalana es el plato estrella.
La crema catalana es una crema pastelera elaborada con yema de huevo, azúcar, harina (de trigo o maíz) y leche aromatizada con canela y piel de limón. Dependiendo del gusto de quien elabore el plato, la leche es aromatizada con vainilla (en vez de canela) o con piel de naranja (en vez de piel de limón).
En la preparación de este postre, tendremos que utilizar soplete de cocina para quemar el azúcar blanco espolvoreado en la superficie de la crema.
Tradicionalmente se presenta la crema catalana en cazuelas pequeñas de barro.
Ingredientes:
- 1 litro de leche entera
- 10 yemas de huevo
- 200 gramos de azúcar para la receta
- 100 gramos de azúcar para la superficie
- 40 gramos de maicena
- Piel de 1 limón
- 1 ramita de canela
Elaboración:
- En una cacerola al fuego vertemos la leche.
- Añadimos la piel del limón y la canela.
- Mantenemos en el fuego hasta que la leche vaya a romper a hervir.
- Retiramos la leche del fuego y la colamos en un cuenco.
- En un recipiente ponemos las yemas y el azúcar.
- Mezclamos Incorporamos la maicena y mezclamos de nuevo.
- A continuación, incorporamos la leche y removemos bien para que no queden grumos.
- Vertemos la mezcla en una cacerola y la ponemos a fuego medio.
- Removemos constantemente hasta que la mezcla espese.
- Cuando la crema está lista, repartimos en pequeñas cazuelas (a ser posible de barro) y dejamos enfriar en la nevera durante 3 horas.
- Transcurrido el tiempo, espolvoreamos sobre la crema el azúcar.
- Con la ayuda de un soplete de cocina, caramelizamos el azúcar.
- Servimos.